Más allá del sospechosismo…

Ya sé que los mexicanos se nos da de a madre  el sospechosismo político. Pero la verdad no creo que Felipe Calderón esté haciendo faramalla y media, asustando con el coco de la influenza porcina, solo por cálculos  electorales. Más bien pienso, que por vez primera, nuestras autoridades activaron un Plan que conocían solo en manuales y en simulacros, que solo les servían para sacarlos de los cajones y quitarles el polvo de encima, así que dejémonos de sospechas y cuidémonos.

Sí, estamos inmersos en campañas electorales locales y en unos días más, inician las federales, tan importantes para la segunda mitad del Gobierno del Presidente Calderón, pero como que no se me da eso de andar especulando que utilizaron esta emergencia médica para llevar algunos votos al Partido que mal preside Germán Martínez. En la grilla se vale sospechar hasta de la esposa, pero esto excede a unos cuernos bien puestos por andar del tingo al tango descuidando la parcela y permitiendo a los compadres pasar a saludar en horas hábiles.

Hablando de campañas, vamos a ver que pasa la próxima semana, aunque pienso que con algunas bajas temporales en sus equipos y con ciertos cuidados, los candidatos van a continuar buscando el voto gastando suela y utilizando bytes.