La audacia de la esperanza

El impass que nos impusieron nuestros candidatos cuando decidieron cortarse las venas en un acto de auto censura del cual no midieron sus consecuencias en el futuro ya muy cercano, me dejó un vacío en el cerebro, que decidí llenarlo re leyendo el libro de Barack Obama que la da nombre a este post.

Cuando menos, en Nuevo León, los candidatos jugaron a la segura, carentes de audacia, amarrados a los consejos de sus asesores jurídicos, que temerosos a descalificaciones de IFES, TRIFES, Consejos Locales, y hasta de los medios de comunicación tradicionales, que volteaban con envidia a la Internet porque aquí se goza de la libertad que a ellos les falta, decidieron darse una tregua, cuando menos “oficialmente”, porque en la Red, lo único seguro es que, no existe Gobierno, Institución, Autoridad o como le quieran llamar, que pueda controlar y censurar lo que aquí sucede.

Craso error con consecuencias graves en el futuro. Se cortaron las alas solos, pero es imposible que se las corten a los que por aquí andamos. Internet es el mundo de los audaces, los que creen en la libertad, en el libre intercambio de ideas, y hasta de mentadas de madre.

Bastante ha costado encontrar un espacio como la Red, para que resulte que, desde México, algunos políticos desfasados de la realidad, amarrados a los compromisos, temerosos de lo que no dominan ni conocen, sujetos a los consejos de quienes solo buscan el honorario seguro, con el mínimo riesgo, piensen que pueden ocultar el sol con un solo dedo.

Larrazabal, que nunca tuvo su sitio porque se la pasó, al igual que a la Biblioteca Nacional, construyéndolo sin poderlo terminar,  fue el que tiró la primera piedra, bajando su sitio inexistente, pero, está presente en el facebook, en el sitio http//amigosdelarazon.com y en todas las redes sociales, incluido you tube. Y que decir de Fernando Elizondo.

Abel Guerra, cuando menos, no cayó en la actitud hipócrita de invocar a la Ley, simplemente bajó su sitio para regresar pronto.

En fin, habrá que ver en que termina esta farsa, por lo pronto me quedo con Barack Obama, que nos dice que “La brecha entre lo que consideramos una conducta correcta en la vida cotidiana y lo que se necesita hacer para ganar una campaña electoral es sólo uno de los diversos modos en que se ponen a prueba los valores de un político.”