La Comisión Estatal Electoral no se sometió a la presión de los partidos políticos que trataban de frenar la candidatura independiente de Jaime Rodríguez Calderón. El autodenominado “Bronco” reunió las firmas suficientes para avalar su proyecto a la gubernatura de Nuevo León. A partir de hoy, Rodríguez Calderón es el candidato a vencer en un escenario de empate técnico porque las posibilidades de crecer en la contienda serán marcadas por los aciertos propios, pero también por la guerra sucia ajena.
¿Cuáles son las trancas que debe saltar Rodríguez Calderón? En primer lugar, su corrupto pasado priista. Es obvio que la inteligencia política del gobernador Rodrigo Medina de la Cruz, manejada con eficiencia por su secretario de Gobierno, Álvaro Ibarra, ya tiene un expediente depurado de la corrupción y los conflictos de intereses de Rodríguez Calderón en el sur de Nuevo León y en García. Por otro lado, para restarle “tosquedad” a su candidatura, le podrían inventar un candidato más bronco que “El Bronco” desde un partido satélite. Con un sparring enfrente, bajarían a Rodríguez Calderón de la arena del duopolio.
Para vencer, Rodríguez Calderón debe convencer, enarbolar la tercera vía que no sólo rompa el duopolio, sino que ofrezca esperanza a los votantes en esta primavera electoral del descontento. En Nuevo León no hay condiciones para una candidatura ciudadana como ha sucedido con los partidos emergentes en Grecia y España. Los ciudadanos de Nuevo León no son unos indignados, históricamente son unos resignados. Acabar con esa resignación al duopolio es urgente para la campaña de Rodríguez Calderón, el tiempo juega en su contra y por eso es relevante imponer la estrategia del voto útil: no desperdiciar el voto en el duopolio sino aprovecharlo en la ciudadanización del gobierno. La política sirve para salirse de las trampas, y si las trampas no tumban a Rodríguez Calderón, en los próximos meses tendrá como gran aliado a Fernando Elizondo Barragán, quien aún espera su momentum y, si no se le da, uniría fuerzas con “El Bronco”.
FELIPE DE JESÚS CANTÚ
La reunión de Felipe de Jesús Cantú con Margarita Arellanes en El Mirador fue una reunión para la foto pública, antes ya se habían dado los acuerdos. Margarita seguirá en la ruta de apoyar a Felipe pero, al mismo tiempo, proseguirá su revanchismo en contra de Zeferino Salgado y Raúl Gracia. En primer lugar, los anteriores no pudieron imponer a Alfredo Rodríguez Dávila como coordinador de campaña (al final quedó Javier Prieto de la Fuente, quien será la cara “limpia” en la coordinación mediática y quien atraerá recursos financieros, pero la coordinación política de la campaña recaerá en el propio candidato y en sus operadores cercanos) y, en segundo lugar, el corte de manga de Margarita en contra del duopolio panista (Gracia-Chefo) también es un recorte de personal: despedir a Tomás Macías del municipio de Monterrey es un golpe “emocional” para Gracia. La alianza entre Margarita y la División del Norte de Pepe Serrano e Iván Garza, no sólo es para obtener Monterrey, sino para hacerse de las riendas del partido.
La inclusión, y no la exclusión, es la ventaja electoral de Felipe de Jesús Cantú, quien tiene también en los priistas desplazados una ventaja sobre la política de exclusión de Ivonne Álvarez: muchas personas allegadas a Felipe de Jesús, incluyéndolo, han sido cercanas a Ricardo Canavati, por ejemplo. Felipe de Jesús tiene clara una cosa: Zeferino Salgado y Raúl Gracia sí pudieron hacerlo candidato, pero ellos no lo podrán hacer gobernador. Necesita otras fuerzas, otros estilos.
IVONNE ÁLVAREZ
La animada reunión de Ivonne Álvarez con Armando Garza Sada (Alfa) en La Catarina denota los agujeros que tiene la campaña de la ex alcaldesa de Guadalupe: las heridas no cierran, tampoco cicatrizan. La candidatura antinatural de Ivonne la ha empujado a lo peor en una campaña, dado el breve tiempo electoral, para sanar las heridas ya no hay manera de realizar una cicatrización, ahora se trata de cauterizar. Y esa sustancia cáustica es la que tiene estancada la estrategia de campaña de Ivonne Álvarez.
La “popularidad” de Ivonne Álvarez es relativa y su primera posición en las encuestas la disminuye porque las ausencias denotan presencias. La encuesta De las Heras Demotecnia tiene un error fundamental: no toma en cuenta la candidatura de Jaime Rodríguez Calderón o la toma en cuenta, pero por estrategia política no la muestra en su difusión. La reunión de Ivonne Álvarez con Armando Garza Sada da el mensaje de una aproximación, no de un apoyo (como el que le dieron en su momento Álvaro y Kana Fernández a Ildefonso Guajardo). Ivonne no tiene a los empresarios de su lado y los enemigos priistas de Rodrigo Medina, también a nivel nacional donde se incluyen cercanos a Enrique Peña Nieto, ya son los enemigos de la candidatura de Ivonne Álvarez.
REFLEXIÓN
Escribe Roberto Saviano en Vente conmigo (Anagrama, 2011): “…una metáfora que siempre me ha parecido muy hermosa. Es la historia de dos emigrantes, dos campesinos, que atraviesan el océano en un vacilante barco de vapor. Uno de ellos duerme en la bodega, el otro está en el puente y advierte que hay una gran borrasca con olas altísimas y que el barco se balancea. Asustado, le pregunta a un marinero:
–Pero ¿estamos en peligro?
–El marinero le contesta:
–Si continúa este mar, en media hora el barco se hunde.
Entonces el campesino corre a la bodega a despertar a su compañero, y le dice:
–¡Beppe, Beppe, si continúa este mar, en media hora el barco se hunde!
Y el otro responde:
–¡Y a mí que más da, si el barco no es mío!
Este es el indiferentismo, eso significa no participar, creer que lo que sucede a tu alrededor no te afecta, equivale a entregar el país a los poderes que saben organizar y gestionar el consenso, y que te lo quitan todo. Considerar al Estado ajeno a nosotros significa perder la posibilidad del derecho. El Estado no es ajeno a nosotros, el Estado somos nosotros».