Yo si voy a ir a votar. Nos cuestan demasiado caro nuestras elecciones como para no ir, o acudir a anular el voto. Vaya campaña tan esteril. Todavía que existiera la posibilidad de que los “nulistas” hicieran algo más que darle peso al voto duro de los partidos, pero naaa.Todo se queda en un simple pataleo que los hará sentir como si realmente hubieran protestado y duro contra los políticos.
Aquí en Nuevo León no se ha percibido tan fuerte la corriente a favor de anular el voto, salvo en las columnas de los diarios principales, pero ya falta poco para darnos cuenta si más del tradicional 2 % anularon su voto. Espero que no.
Medina vs Elizondo, ¿Qué decir que no se haya dicho ya? A mi me ha gustado la campaña de Rodrigo, que salvo el error de los “viejitos” bailando afuera de El Norte, se ha visto alegre, incluyente, propositiva y dinámica. La decisión que tomó durante la crisis de la influenza, de no encerrarse y salir a entregar gel, tapabocas y hacerse presente, le ganó simpatías y reconocimiento. A Elizondo lo he visto – en los medios, obviamente – más concentrado en gritar foul, en quejarse de Natividad – ¿ no que se adoraban?- que en difundir sus propuestas.
El Caso es que ya se cierran las campañas y veremos como terminan. Saludos.
Estrategia, libros y poder en sintonía 