El Norte escondió la cola. Después del rechazo que recibió y percibió por la burda manipulación que hizo sobre los supuestos resultados del debate que organizó en sus instalaciones, con sus consejeros editoriales, con sus reglas y con sus intereses, donde hizo Rey por un día a Fernando Elizondo, coronado por el 74 % de sus consejeros, todos ellos, afines del mismo anfitrión, que les ofrece un poco de luz pública por unos cuantos meses, y que pretendió, con su debate, demostrar la fuerza que tiene, el CEE de Nuevo León organizó un debate abierto a todo mundo donde se demostró que Elizondo no es el Mesias que solo El Norte promueve, ni Rodrigo Medina es el tonto que los Consejeros de El Norte reprobaron.
El día del debate escribí sobre el perfil de los Consejeros Editoriales del medio que recibió mi colaboración por más de quince años. No quiero decir más al respecto. El Norte se sintió tan apenado del manejo que le dio a su evento, que no volvió a sacar una nota más sobre su fiesta particular. Y hoy, el debate que organizó el CEE no le mereció ninguna línea: para que ponerle sal a su herida partidista.
La contienda en Nuevo León continúa cerrada. Ni Medina, ni Elizondo, pueden sentirse ganadores. Pero de que Rodrigo planteó sus diferencias con Fernando, eso que ni qué. El pasado versus el Futuro. El pasado, sin importar Partidos, bien lo dijo Medina. En estos momentos, chueco o derecho, los candidatos deben plantear claramente sus posiciones, y hacerle entender a los ciudadanos en que se diferencian de su contrincante. Y Rodrigo lo hizo excelentemente. Las reglas del pasado, contra una nueva manera de entender, plantear y ejecutar la política. Vienen tiempos mejores.
ps me gustarias
k no le
hecharan
tanto a los partidos por k al fin y al co votamos
k no
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